en un Dios poderoso ni en santos ni en los curas.
Tú, puede que tú, no creas en mandamientos,
Sagradas Escrituras, tampoco en Evangelios.
Pero, dime,
con la luz de los atardeceres paseando a orillas de una playa;
con esa paz que se queda contigo
cuando ayudaste a quien te lo pidiera
o el abrazo puro de un amigo
que de una pena amarga te consuela?.
En eso búscalo y no con barbas largas
o el abrazo puro de un amigo
que de una pena amarga te consuela?.
En eso búscalo y no con barbas largas
sobre nubes blancas,
que allí no está Dios.
Dios vive en los ojitos de un niño que sonríe
y en la mujer que dijo te daré mis besos si tú me los pides,
Y vive en los olores de la lluvia primera
y vive en los colores de todas las flores de la primavera.
Y está… si quieres encontrarlo,
búscalo en tu mare y en lo que te quiso;
en los mimos que te dio al cuidarte está la llave...
la llave del Paraíso".
Dios vive en los ojitos de un niño que sonríe
y en la mujer que dijo te daré mis besos si tú me los pides,
Y vive en los olores de la lluvia primera
y vive en los colores de todas las flores de la primavera.
Y está… si quieres encontrarlo,
búscalo en tu mare y en lo que te quiso;
en los mimos que te dio al cuidarte está la llave...
la llave del Paraíso".
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